Economía

Un Merval verde esperanza se contrapone a un rojo incertidumbre de los bonos soberanos en dólares

Por: Mariano Cáceres

En el plano internacional, a pesar de la volatilidad que caracterizó al mercado de acciones durante los últimos días, el balance de la semana fue positivo en orden a la continua mejora en el ritmo de vacunación, a los resultados corporativos mayormente por encima de las expectativas de los analistas y debido al firme avance en las negociaciones en el congreso estadounidense por el paquete de estímulo fiscal de 1.9 billones dólares prometido por el flamante presidente norteamericano Joe Biden. Adicionalmente, trajeron tranquilidad al mercado global las declaraciones de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, quien expresó que desde el banco central más importante del mundo continuarán con política monetaria laxa buscando apoyar a la recuperación de la economía.

Nuevamente, el viento de cola internacional, explicado en la esperanza de un rebote económico más rápido, fue el principal protagonista en el impulso del índice Merval que cierra por segunda semana consecutiva en verde en 51.430 puntos (+0,74%), acumulando un saldo positivo en el año de +0,40%. Como nota de color, a contrario sensu de lo que sucede generalmente, esta vez, la evolución bajista del Contado con Liquidación limitó el alza en pesos del principal índice de acciones argentino. Los papeles del panel líder tuvieron un desempeño mayormente negativo con Cablevisión Holding (-7,20%) y Grupo Financiero Valores (-5,28%) como los de peor performance semanal. Lo mejor del panel líder vino de la mano de YPF (+6,77%), Ternium (+3,89%) y Transener (+3,10%).

Al igual que la semana pasada la petrolera YPF (+6,77%) fue una de las impulsoras del Merval, raíz del resultado del proceso de reestructuración de su deuda, por el cual, con una aceptación de casi el 60%, canjeó USD 246 millones del bono 2021 amortizable en marzo, logrando evitar el default y obteniendo la validación del Banco Central en relación al requerimiento de refinanciación exigido por la fatídica normativa cambiaria emitida durante 2020. Respecto a la totalidad de bonos sujetos a canje la aceptación fue cercana al 32%, resultando en la emisión de nuevos títulos al 2026, 2029 y 2033 por aproximadamente USD 2.100 millones.

En la semana el gobierno nacional se reunió por un lado con la mesa de enlace y por otro con líderes sindicales y con referentes de las principales empresas nacionales para empezar a debatir sobre el tan mencionado acuerdo de precios y salarios, que sería el “arma” del ala política del gobierno para controlar la inflación. La batalla ha comenzado más que complicada, ya que el dato de enero (4%) pone en tela de juicio el 29% de inflación anual que proyecta el presupuesto nacional para 2021.

Entre los datos que surgieron de las reuniones se mencionaron en los medios frases tales como paritarias sin techos y que el gobierno no aumentaría retenciones ni aplicaría cupos a las exportaciones, por tanto, ambos títulos aportarían a la paz social y política, pero no estarían aportando nuevas soluciones al flagelo inflacionario que azota el país. Los bonos CER fueron los principales beneficiarios del alto dato del IPC y de la aparente inacción del gobierno, ya que tuvieron en promedio alzas de +3%, cotizando a tasas negativas en el tramo más corto de la curva situación que marca las altas expectativas alcistas sobre esta variable macroeconómica.

Mientras tanto, en lo que referido a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional la semana no dejó demasiada tela para cortar ni información precisa sobre los avances en el eventual acuerdo. No obstante, entre lo que se puede comentar Alejandro Werner, director en el organismo del departamento del hemisferio occidental, indicó que Argentina está trabajando intensamente para llegar a las fechas propuestas para cerrar un acuerdo antes de mayo, aunque, expresó que la fecha es ambiciosa.

La falta de avances concretos en el acuerdo con el FMI no permite renovar expectativas sobre los activos locales, resaltándose esta incertidumbre en los precios de los bonos soberanos en dólares, que opuestamente a las acciones, tuvieron otra semana para el olvido, con pérdidas tanto de ley extranjera como en legislación local. Las curvas soberanas en dólares, que se encuentra invertida desde el mes de octubre con tasas superiores a 19% y en paridades aún en niveles del default técnico 2020, mostraron pérdidas promedio de -1,28% en ley local y de -1,79% en ley internacional. El riesgo país cerró alcista en 1.461 puntos básicos un +1,04% semanal, acumulando un +6,49% del alza en lo que va del año.

En lo referente a la divisa norteamericana, el ministro Guzmán destacó en una entrevista televisiva que tenían una devaluación objetivo la de divisa oficial de 24% y que una parte importante de la misma se concentraría en la primera parte del año. En otras palabras, estarían esperando un tipo de cambio mayorista en torno a los $104,34 para el mes de diciembre y solapadamente, en un análisis ceteris paribus, una caída del tipo de cambio real multilateral al contrastar la tasa de devaluación con la inflación proyectada por el ministerio. Por último, en lo que respecta a dólares bursátiles, el CCL cerró en $ 151,61 (+3,04%) y el MEP terminó en $ 147,65 (-1,30%), dejando la brecha con el dólar oficial en 71% y 67% respectivamente.

*Mariano Cáceres – Research y Estrategia

Magister en Finanzas (Univ. Torcuato Di Tella) y Contador Público (Univ. Católica de Cuyo). Investigador Financiero en Fundación Bolsa de Comercio de San Juan y Analista Senior de Research y Estrategia en San Juan Bursátil. Más detalle en www.linkedin.com/in/mariano-cáceres-colombo-b45299106/

Botón volver arriba