Una tendencia en aumento: oficios sin género
Desde hace un tiempo se está produciendo un cambio de paradigma a nivel mundial en ámbitos que históricamente obedecían a los estereotipos de género.
Poco a poco, los oficios que eran exclusivamente atribuidos a los varones -como si ciertas habilidades prácticas e intelectuales fueran nativas del hombre- comienzan a ser ejercidos por mujeres gracias a diferentes iniciativas formativas dirigidas específicamente para ellas.
Deconstrucción de los roles
A través de cursos y talleres brindados por diferentes universidades, centros culturales, entidades municipales, fundaciones y colectivos feministas, las mujeres pueden acceder a conocimientos básicos hasta formarse profesionalmente en rubros como electricidad, plomería, carpintería, construcción y herrería, que siempre estuvieron reservados para el género masculino. El objetivo de estas capacitaciones es desmitificar y brindar las herramientas necesarias a las mujeres para desempeñar desde trabajos de pintura hasta reparaciones eléctricas más complejas.
Salida laboral
«Las mujeres sufren mayores niveles de desempleo y precarización laboral que los varones y ganan en promedio un 27% menos que sus pares. Esta brecha se amplía para quienes están precarizadas. En la Argentina, quienes están más expuestos a la desocupación son los jóvenes menores de treinta años. Sobre todo las mujeres jóvenes, entre quienes 1 de cada 5 busca activamente un trabajo y no lo consigue”, advierten desde EcoFemini(s)ta, una organización que nació en mayo de 2015 con el objetivo de visibilizar la desigualdad de género a través de la difusión de datos, estadísticas y contenidos académicos.
El desembarco de mujeres formadas en oficios previamente dominados por los hombres no sólo rompe con los mandatos culturales, sino que además les abre la puerta a la oferta laboral de sectores a los que antes no podían acceder.
La organización Mujeres a la obra brinda cursos dictados por y para las mujeres. Desde hace poco más de un año ofrecen cursos de electricidad, albañilería, plomería y más.
Con esta iniciativa pretenden independizar a las mujeres para sean ellas quienes resuelvan los problemas del hogar, pero también ayudarlas a independizarse económicamente otorgándoles herramientas para insertarse en el mercado laboral. En la misma provincia se encuentra además De-construcción, un colectivo de mujeres que dicta un taller de electricidad doméstica básica, entre otras actividades.
En la provincia de Buenos Aires, la Red Vivir sin Violencia invita a participar de las clases gratuitas de oficios para mujeres con diferentes especialidades: plomería hogareña, albañilería básica y también el uso de herramientas.
Cómo cambiar un cuerito, arreglar una cerradura, hacer un empalme eléctrico, restaurar una pared rota o descascarada y cómo utilizar las herramientas manuales y eléctricas son algunos de los aprendizajes que se desarrollan en las clases.
Tecnología, redes y aplicaciones
La Fundación Mujeres en Igualdad lanzó en 2018 Femplea, una plataforma para que mujeres puedan contratar gasistas, plomeras, profesionales de computación, albañiles y electricistas mujeres.
Además, las usuarias pueden acceder a un listado de capacitaciones disponibles en oficios que tradicionalmente han sido ejercidos por los hombres y así impulsar su inserción laboral. Femplea tiene convenios con sindicatos y universidades para brindar capacitaciones dirigidas a mujeres. Cabe destacar que esta nueva app se puede descargar desde las reconocidas plataformas Android y iPhone y es muy fácil de usar para cualquier persona.
Sin embargo, quienes deseen sumarse a la red deberán pasar por un proceso de confirmación de género mediante la tecnología de reconocimiento facial, una garantía de seguridad. Del mismo modo, el grupo de Facebook Transfeministas Trabajando nació hace casi cinco años y ya cuenta con 22.000 miembros.
En esta red de autogestión se encuentra una bolsa de trabajo compuesta por trans, travestis, mujeres, lesbianas y no binaries formadas en diferentes oficios, y bajo la premisa de ofrecer una mayor seguridad al contratar a alguien que realice reparaciones en el hogar.
La iniciativa fue replicada en Córdoba, donde ya cuenta con miles de usuarias que comparten información sobre capacitaciones, servicios y búsquedas laborales.