Espectáculo

Murió Samuel E. Wright, el actor que le puso la voz al cangrejo Sebastián en “La sirenita”

Samuel E. Wright, el actor que le puso la voz al divertido cangrejo Sebastián en la clásica película animada La sirenita, murió a los 74 años, tras haber luchado el último tiempo contra un cáncer de próstata.

“Era la luz más brillante”, dijo su hija Dee, que confirmó al medio The Hollywood Reporter que Wright murió el lunes por la noche en su casa de Walden, Nueva York.

Nacido el 20 de noviembre de 1946 en Camden, Carolina del Sur, la trayectoria del intérprete, más allá de trascender por su particular voz en el film de Disney, estuvo ligada durante mucho tiempo a la comedia musical y al teatro de Broadway: debutó en 1971 en Jesucristo Superstar y encarnó a Mufasa en el show de El Rey León, a partir de 1997, una obra que todavía sigue activa.

Obtuvo su primera nominación al premio Tony -los máximos galardones teatrales del mundo- en 1984 por su interpretación de un padre severo en el musical The Tap Dance Kid; luego recibió otra por El Rey León, en 1998.

Wright también apareció como la leyenda del jazz Dizzy Gillespie en Bird de Clint Eastwood, en 1988, y en 1989 le llegó el rol que lo lanzó a la fama. No solo por su interpretación sonora del cangrejo Sebastián, sino por su trascendencia: el actor interpretó el tema “Under the Sea”, que ganó el Oscar a la mejor canción original y “Kiss the Girl”, que también fue nominada.

Más tarde, grabó álbumes con sonido reggae para Walt Disney Records en la voz de Sebastián e hizo una participación para la secuela directa en video de La sirenita. Además del teatro, el cine y la música, tuvo un recorrido por la televisión. Interpretó a un policía en Los Dukes de Hazzard y también en el spin-off de esa serie, Enos. Además participó de The Cosby Show, Simon & Simon y Spenser: For Hire.

“Quizás no todos los actores dirían esto, pero si no quisieran ser inmortales, no estarían actuando. Por eso, quiero dejar mi pequeña huella en el mundo”, comentó Wright, en una entrevista con Los Angeles Times, en 1991.

“La peor pesadilla de un actor es escuchar, dentro de 10 años, ‘¿Sam Wright? ¿Quién era Sam Wright?’. Si tienes ese tipo de actitud, tiendes a asumir cada rol y convertirlo en el mejor que hayas desempeñado. No sabés por qué te juzgará la gente. No importa si es un dibujito, Dizzy Gillespie u Othello, voy a actuar con el mismo fervor, por si alguien está mirando“, reflexionó, en ese momento.

En ese artículo, además, contó que tenía una colección de cangrejos rojos en su casa, la especie a la que le puso la voz en el cine: “Cada vez que paso y los veo, hago una reverencia y digo ‘gracias por esta casa y por la educación de mis hijos’”.

Fuente: TN

Botón volver arriba