Cómo hacer abono orgánico con desechos caseros

Cómo hacerlo paso a paso
Para hacer abono orgánico elige un recipiente que tenga al menos un metro de profundidad, te recomendamos un compostador como este. Dentro del recipiente coloca cinco dedos de tierra. Sobre la tierra, agrega los desechos orgánicos que tengas ya en casa: restos de verduras o frutas (cáscaras de plátano), hojas y hierbas secas, café, té usado. Para finalizar, tapa con un poco de tierra todos los desechos.
Conforme pasa el tiempo ve revisando y removiendo la mezcla para airearla, moviendo el fondo hacia arriba y al revés. Si vives en un clima caluroso y seco puedes humedecer la mezcla con un poco de agua. Cuando pasen varias semanas verás que en el centro del abono aparecerá una tierra negra y grumosa: esa es la que buscamos y es la ideal para tus plantas.
Cuándo estará listo: el proceso suele duras entre dos a cincos meses. Estará listo cuando notes que toda la materia orgánica se ha descompuesto completamente, es decir, que no quedan los desechos originales, la mezcla tenga un color marrón oscuro y el olor sea como el de tierra mojada (no debe oler a podrido).
Nosotros utilizamos un compostador como este, que nos ha resultado más resistente que el resto de opciones y a la larga nos dará menos quebraderos de cabeza. Con buena aireación y apertura inferior.
Recomendaciones
Usa guantes para ir mezclando los desechos junto con la tierra.
Cuando tengas listo el abono úsalo con moderación, según las necesidades de la planta. Empieza con poco.
No aplastes la mezcla y remuévela cada dos o tres semanas.
Asegúrate de elegir un recipiente apropiado, que se pueda mantener aireada la mezcla.
Utiliza un acelerador de la descomposición ecológico para que los restos se transformen en abono orgánico antes. Por ejemplo este, que también es ecológico.