La hermana de Furia habló de la salud de la participante ante su salida de la casa
Juliana Furia Scaglione deberá abandonar temporalmente la casa de Gran Hermano por motivos de salud. La decisión, anunciada por el conductor Santiago del Moro, surgió a raíz de la necesidad de que la participante se someta a exámenes médicos más exhaustivos. Aunque todavía se desconoce cuándo y cómo será la salida de la concursante, la situación generó un amplio debate y especulación entre los seguidores del programa.
En ese contexto, su hermana Georgina, más conocida como “Coy” decidió llevar cierta “tranquilidad” a los furiosos. Lo hizo a través del canal de difusión de Instagram, “Furioneta”, donde se comunica con los fanáticos del ciclo, e intentó poner paños fríos a la situación.
“Gracias por todos los mensajes de amor para Furia”, comenzó la mayor de las Scaglione. Y siguió: “¡Está todo bien! ¡Furia está más fuerte que nunca! ¡Muy cuidada y protegida por todos! Gracias, gracias, gracias de corazón a todos por tanto amor”, afirmó la joven y, para el final, dejó un mensaje a los haters. “No inventen noticias falsas, la única voz real es la de Furia. No voy a ser tía”, dijo ante las reiteradas versiones sobre un posible embarazo de la participante, algo que en los últimos días circuló en las diferentes redes sociales.
Según informó este martes Santiago del Moro, Furia deberá dejar la casa por unos días, para someterse a una revisión médica. “Amigos, les quiero contar algo importante. Juli próximamente va a salir de la casa de GH según han decidido los médicos para ampliar unos estudios clínicos”, expresó el conductor del ciclo en su cuenta oficial, la cual suele utilizar para dar noticias importantes del reality.
Tras el anuncio, Del Moro no dio más precisiones sobre el estado de salud de la doble de riesgo. “Es ella la única que va a elegir qué contar. Obviamente, cuando los profesionales de la salud así lo consideren, volverá a la casa y seguirá en competencia”, aseguró.
Vale recordar que, en los últimos días, la participante venía expresando ciertos malestares debido a la mala alimentación y al stress propio del encierro y del juego. El grupo viene perdiendo sucesivas pruebas semanales, lo que repercute directamente en el presupuesto para hacer las compras en el supermercado. Así, ante la disminución de víveres, los hermanitos acordaron repartirse parte del dinero para gustos personales. Furia se lo gastó en cigarrillos y resignó su alimentación y se cree que su malestar podría tener que ver con esto.