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Por un ADN, detuvieron nuevamente a uno de los «clientes» que abusó de la joven prostituida por su madre

A sólo días de haber recuperado la libertad, el excombatiente Roberto Néstor Arroyo, señalado como uno de los «clientes» de la joven que era prostituida por su madre desde los 5 a los 20 años, volvió a ser detenido. Es que una prueba de ADN confirmó que es el padre del niño que la víctima tuvo a los 15 años, producto de los abusos a los que era sometida.

El hombre había sido liberado tras pagar una fianza y con las condiciones de no salir de la provincia o acercarse a la víctima. Sin embargo, la contundente prueba en su contra lo llevó de nuevo al banquillo de los acusados donde se le dictó una nueva prisión preventiva.

«Se sigue con las medidas probatorias, inspecciones oculares. El juez puso un plazo de 6 meses de investigación penal y creemos que podremos culminar la compleja investigación en ese tiempo», dijo esta mañana el fiscal de la UFI Cavig, Ignacio Achem.

En la causa hay otros dos detenidos: la madre de la joven, quien sigue sosteniendo su inocencia, y un suboficial retirado de la policía de San Juan, que también fue identificado como uno de los hombres que abusaban de la menor.

Según declaró la joven, sufrió abusos sexuales desde los 5 años de edad por adultos conocidos de su madre, a quienes la propia progenitora se la entregaba. La víctima relató que la mujer llevaba hombres a su casa para que abusen sexualmente de ella, y la obligaba a practicarles sexo oral.

Un caso estremecedor

A los 14 años, la joven fue obligada por su madre a mantener relaciones sexuales con otro de los denunciados por primera vez, señalando que en una ocasión este adulto la siguió hasta su casa y, en un pasillo, la violó. La víctima señaló en su relato que, en el estado de sometimiento al que fue reducida por su propia madre, las visitas de diferentes hombres eran cada vez más frecuentes. No pudo precisar el número, pero aseguró que fueron más de diez los adultos a los que fue entregada con fines sexuales.

A los 15 años de edad quedó embarazada como consecuencia de los abusos a los que era sometida, sin poder precisar quién era el progenitor. La madre la obligó a abortar, dándole pastillas que le causaron múltiples sangrados.

La denunciante también declaró que meses después quedó embarazada nuevamente, sin poder precisar cuál de los abusadores sería el padre, porque en esa fecha iban tres hombres de manera habitual a someterla. Indicó que tuvo a su hijo, quien actualmente tiene 9 años de edad. Además dijo que, a partir del nacimiento, su madre extorsionaba a uno de los abusadores y le pedía dinero para no denunciar el abuso.

Fuente: Diario de Cuyo

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