El esposo de Shearley, la estudiante de Policía que movilizó a la comunidad sanjuanina, busca trabajo: «Tenemos miedo de volver a la situación en la que estábamos»

Hace algunas semanas, el caso de una joven estudiante de Policía que, junto a su familia, se encontraban en una situación de extrema vulnerabilidad, conmovió a toda la comunidad sanjuanina.

Todo comenzó cuando varios compañeros de Shearley se unieron para conseguir un teléfono celular que le permitiera a la chica de 26 años continuar con sus estudios, ya que la falta de recursos dificultaba su acceso a las clases virtuales. Fue a partir de esa circunstancia que conocimos su historia.

En ese momento, Shearley, su esposo y sus 4 hijas vivían en una habitación que ellos mismos habían construido con cañas, barro y nailon en 9 de Julio. No tenían agua ni gas ni electricidad y su única fuente de trabajo eran las changas que encontraban día a día.

Gracias a la solidaridad de muchos sanjuaninos y sanjuaninas, la familia logró mudarse a una casa con todos los servicios, ubicada cerca de la Escuela de Policía, para que la chica pueda estudiar con mayor comodidad y terminar el último año de la carrera.

Pero, más allá de la felicidad de tener una vivienda digna, el problema de la falta de trabajo es una constante que aún los agobia.

«Mi marido no consigue trabajo en ningún lado, y se nos hace difícil pagar el alquiler de la casa que conseguimos con ayuda de la gente», contó Shearley. «Tenemos mucho miedo de volver a la situación en la que estábamos».

Durante el día, José, la pareja de la joven, se las rebusca haciendo changas de todos los rubros. «Puede trabajar en albañilería, carpintería y cualquier otra cosa», contó su esposa. En la noche, el joven asiste a la escuela para terminar el secundario.

Ambos jóvenes tienen toda la voluntad de prosperar, de salir adelante, para poder darle a sus hijas una mejor calidad de vida.

Quienes tengan la posibilidad de ayudarlos, pueden comunicarse al 2656037970.